Casi 17.500 estufas y calderas de biomasa de alta eficiencia funcionaban en la Comunidad de Madrid a finales de 2018, el 23% más que el año anterior, según el Informe Anual 2019 del Observatorio de la Biomasa que gestiona la Asociación Española de Valorización Energética de la Biomasa (Avebiom).
Este incremento de las instalaciones de biomasa tecnológicamente avanzadas, que supone la incorporación de casi 3.300 hogares y edificios de uso colectivo, sitúa el volumen de negocio del sector regional en 50,3 millones de euros.
La fabricación y comercialización de los nuevos equipos, así como las tareas de mantenimiento y venta de biocombustibles sólidos, entre otras, generaron una actividad que emplea a 596 personas, el 10,7% más que el ejercicio anterior.
En cuanto a la energía consumida por los equipos de biomasa en la Comunidad de Madrid, ascendió a 83,68 KTEP, lo que ha permitido el ahorro equivalente de casi 97,5 millones de litros de gasóleo en 2018.
También es relevante la contribución del sector a la estrategia de reducción de gases de efecto invernadero, ya que los 17.492 equipos de biomasa instalados en la Comunidad evitaron la emisión de 258.700 toneladas de CO2, similar a la contaminación que producen durante un año 172.500 turismos, el 3,5% de todo parque móvil de la región.